La gran pérdida

Ayer se fundió el disco duro de mi computadora. Sin motivo aparente desaparecieron en un instante 5 años de mi historia personal. Como si un incendio destruyera el archivo de la nación, el día de ayer me quedé sin memoria. Fotografías, canciones, trabajos de la universidad, apuntes de clase, desarrollos de páginas de internet, materiales académicos, correos electrónicos, programas y aplicaciones...

Todo ha desaparecido.

A veces es difícil valorar la cantidad de uno que queda atrapada en una computadora. Una apreciada extensión artificial de mi memoria y cerebro ha sido extirpada.

Ni modo...